CLAROSCUROS / ¡QUÉ LLUEVA!

Por Salvador Castro Iglesias

 

  • Que llueva, que llueva, la virgen de la cueva. . .

 

Recuerdo cuando era niño y llegaba el ardiente verano Sudcaliforniano, amén de las clásicas vacaciones anuales en las que salíamos a nadar a las playas, jugar todo el día y ayudar en las tareas de la casa; por lo general suspirábamos por que nos llegara algo de agua de lluvias y así poder brincar en los charcos que se formaban al paso de los pequeños arroyos. Pura felicidad si señor.

Lo que no sabíamos muy bien ni a ciencia cierta, es que solo gracias a las lluvias estivales y muy escasas por cierto, en esta remota parte del País, es que solo gracias a ellas (las lluvias) era como se recargaban los mantos acuíferos para así poder consumir agua filtrada y que se extraía por medio de bombas para mandarlas a través de las redes de agua potable a la población.

Con el tiempo fui comprendiendo la gran importancia de las lluvias, mismas que ya hacía algunos años solo se presentaban de manera esporádica y escasa y que al ir creciendo la población fue cada día más necesaria.

Estos meses que van corriendo hemos visto un real incremento en las lluvias, estas a través de ciclones, tormentas y huracanes que son los portadores de grandes cantidades del preciado líquido que tanto necesitamos los Sudcalifornianos para poder sobrevivir.

Sin embargo tales fenómenos meteorológicos aportan vientos muy violentos, corridas de agua por los arroyos y obvio nos dejan montones de destrozos, calles llenas de baches (por aquello de la baja calidad en su construcción), árboles caídos, autos arrastrados por las corrientes de tales arroyos, y así, muchos destrozos que deben ser solucionados una vez que pasen los temporales.

Al ver tanta agua corriendo alegremente por los arroyos y saber que esta se va derecho al mar, no dejo de preguntarme ¿Qué pasó con el llamado Plan Hidráulico Estatal conformado por el hoy fallecido Gobernador Alberto Andrés Alvarado Arámburo durante su mandato?, la construcción de presas, represas de gaviones y demás quedaron en el olvido.

De Protección Civil para este caso de fenómenos meteorológicos vi con asombro la gran incapacidad de las Autoridades Municipales, dando aviso el mismo día de las primeras lluvias para que los nenes no asistieran a clases, cuando la seguridad es vital en la población.

Bien dice el dicho “si no sabes, pregunta”, cosa que bien pudieron hacer con tiempo a alguien que demostró capacidad y entrega en la labor de Protección Civil Estatal de nombre Carlos Godínez, quien sin tener a la fecha cargo alguno en ese rubro informó oportunamente de las trayectorias del fenómeno, mientras el Director de Protección Civil Municipal no veía ni daba una, caray.

Aún no entiendo que pasa, se va una Administración, llega otra y por soberbia son incapaces de pedir ayuda, acercarse unos con otros y juntos sacar adelante las tareas encomendadas.

El caso es que gracias a Dios no hubo muertes que lamentar y que salimos adelante una vez mas y ahora nos queda esperar otros fenómenos que seguro estoy vendrán de visita a regar nuestra sedienta tierra.

No dejo de reconocer la labor eficiente, sistemática y oportuna de las Autoridades Municipales de Los Cabos, quienes con antelación se reunieron para prevenir cualquier contingencia, abrir refugios temporales para casos de emergencia y resguardar a la población; e inmediatamente se pusieron a trabajar y limpiar las calles de Los Cabos para que este retome la vida cotidiana.

Aquí en La Paz otra vez resultó que muchas de nuestras calles se encuentran llenas baches y que a pesar de la ardua labor emprendida por la Secretaría de Obras Públicas Estatal en el re encarpetado con concreto hidráulico de nuestras calles, aún falta mucho por hacer.

Volviendo al tema de la enorme cantidad de litros de agua que se desperdician durante las llovidas, no he visto propuesta seria alguna sobre algún plan que permita la recuperación o almacenamiento de ellas y al parecer no existe nada al respecto de momento, cosa que seguro estoy sería bienvenida por todos los habitantes de la Península.

Nos quejamos durante cada verano de que no llega suficiente agua a nuestros hogares, de que a muchos otros solo les llega una o dos veces a la semana, de que se desperdicia mas del 40% en la vieja y obsoleta red de agua potable, de muchas cosas. Pero sigo sin ver algún viso de solución  a esto y no dejo de preocuparme porque al paso que vamos, ni con 5 o más huracanes nos alcanzará el agua para todos porque esta se va directo al mar.

Nos leemos más adelante …