Por Alejandro Barañano
Cuando MARKO CORTÉS llegó a la dirigencia de Acción Nacional el 19 de noviembre del 2018, ese instituto político era gobierno en Aguascalientes, Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Nayarit, Puebla, Querétaro, Tamaulipas y Yucatán, y de esas once entidades nueve ya han tenido elecciones para renovar la gubernatura y sólo faltan, Guanajuato y Yucatán.
En resumen, de los once que tenía el PARTIDO ACCIÓN NACIONAL sólo le quedan cinco, pues en Baja California, Baja California Sur, Nayarit, Puebla y Tamaulipas los gobernadores surgidos del blanquiazul tuvieron que entregar el poder a sus contrincantes de Morena.
A pesar de esos resultados, MARKO CORTÉS continúa al frente del PAN rumbo a los comicios del 2024, esto con la idea inalterable hasta ahora de hacer alianza con el PRI y el PRD y la insistencia de sumar a Movimiento Ciudadano.
Ante quienes cuestionan si esa es la mejor estrategia que puede seguir el partido fundado por MANUEL GÓMEZ MORÍN, el michoacano, y me refiero a MARKO CORTÉS, tuvo un respiro en los comicios del 2021 cuando la coalición Va por México arrebató una parte de la Cámara de Diputados y varios municipios importantes a Morena.
De hecho, el jefe nacional panista ha seguido viviendo políticamente de esos resultados, con todo y que ya han transcurrido dos años; pero en 2022 NO PUDO REFRENDAR EL LOGRO, pues el partido albiceleste sólo ganó dos elecciones de gobernador en juego: Aguascalientes y Durango y, en ese último, de la mano del PRI.
Las cifras de las elecciones del domingo 4 de junio en Coahuila y el Estado de México volverán a poner a MARKO CORTÉS y su estrategia bajo la lupa, porque en Coahuila la votación por el PAN se redujo a la quinta parte, si se toma como parámetro las elecciones de gobernador de 2017.
En el Estado de México se esperaba que los electores panistas hicieran una mayor aportación de votos a la coalición encabezada por la priista ALEJANDRA DEL MORAL. Sin embargo ésta sólo cosechó unos 700 mil sufragios en los que el ciudadano cruzó el emblema de Acción Nacional, prácticamente la misma cantidad que recibió JOSEFINA VÁZQUEZ MOTA hace seis años y casi 200 mil menos de los que obtuvo el PAN en las intermedias de 2021 en la entidad. ¡QUIHÚBOLE!
Si bien se puede alegar que los resultados de aquel domingo en el Estado de México no son del todo malos para la alianza, el saldo para ACCIÓN NACIONAL no es fácil de defender. Mucho menos en Coahuila, donde el PRI no necesitó de ayuda para ganar.
Luego entonces mientras MARKO CORTÉS arrecia sus efusivos llamados hacia Movimiento Ciudadano para que se sume a la alianza opositora, seguramente habrá un número creciente de correligionarios suyos que se pregunten si el jefe nacional del PAN sabe lo que está haciendo, igual a lo que ocurre en BAJA CALIFORNIA SUR con otra michoacana: GUADALUPE SALDAÑA CISNEROS . Veremos que sucede; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .
