BALCONEANDO / ESSA: ¡EMPRESA SALADA!

Por Alejandro Barañano

 

Hay quienes dicen que las instrucciones presidenciales deben ejecutarse a la brevedad. Y en los tiempos de la CUARTA TRANSFORMACIÓN no hay excusas de valgan, por lo que si un funcionario está imposibilitado de cumplirlas —sin importar la razón— es separado de su puesto, y por eso ya es oficial que CARLOS PETTERSON OLIVAS dirigirá el destino de la EXPORTADORA DE SAL a pesar de la advertencias hechas de que es un tipo cercano a la titular de Secretaría de Economía, RAQUEL BUENROSTRO.

Hasta donde sabemos fue funcionario de la SECRETARIA DE HACIENDA, entonces bajo el mando de la ahora titular Economía, y ahora por obra y gracias del Espíritu Santo dirigirá el destino de la salinera más grande del mundo convirtiéndose en el CUARTO DIRECTOR GENERAL DE ESSA en 4 años.

También sabemos que el ahora flamante nuevo directivo se ha desempeñado como titular de un área en la SECRETARIA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA como jefe de Unidad en Pemex Exploración durante la gestión de VICENTE FOX QUESADA, así como en el Servicio de Administración Tributaria precisamente bajo el mando de RAQUEL BUENROSTRO.

Pero en la designación de CARLOS PETTERSON OLIVAS pesa el señalamiento de haber recibido en el año 2021 un contrato por un monto de 495 mil 945 pesos vía adjudicación directa de la mismísima SECRETARIA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA. Pero eso no importa. ¡QUE VIVA LA 4T!

Ahora bien, recordemos que el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR prometió a los sudcalifornianos que la EXPORTADORA DE SAL alcanzaría nuevamente niveles máximos de producción con los consecuentes beneficios económicos y sociales para una de las zonas más aisladas de la media península. Pero curiosamente desde que instruyó la fallida reconfiguración de la empresa paraestatal –curiosamente– han pasado tres directores generales y dos secretarias de Economía. ¡QUIHÚBOLE!

Con la llegada del cuarto director general de ESSA, se tendrán que ver los reportes atípicos que van en contrasentido con los indicadores programáticos de la compañía para el ejercicio fiscal 2022, la cuales contemplaban acciones específicas para optimizar los procesos de transporte marítimo a MORRO REDONDO, donde al cierre del año 2022 estaban contempladas 3 mil 200 horas para el embarque de sal industrial y mil 600 horas en las descargas de 7.5 millones de toneladas de sal.

También tendrá que ponerse baje lupa la autorizado de la adquisición de siete transportadoras de banda para la zona de apilamiento en la ISLA DE CEDROS y la sustitución de equipos obsoletos que ha sido una intención constante, pero ejecutada parcialmente.

Y ni qué decir sobre la compra del remolcador con potencia de 5 mil 300 caballos de fuerza que se convirtió en una supuesta prioridad, luego de que la frustrada renovación de la flota programada desde el año 2014 simplemente dejó en funcionamiento una embarcación que acumulaba 41 años de antigüedad.

Aunado a todo ello tendrá que enfrentar la adquisición de las barcazas CORMORAN y MEGALODÓN, mismas que generaron observaciones ante el ente fiscalizador, esto no obstante que el anterior director, GREGORIO CAVAZOS RODRÍGUEZ, subrogó el servicio del transporte a METRA, una empresa regiomontana, lugar de donde el amigo procedía.

La SECRETARIA DE LA FUNCIÓN PÚBLICA ya presentó desde hace tiempo tres denuncias penales. Dos por la compra de los dichosos remolcadores y otra más por la presunta falsificación de documentos de la que habrían sido responsables integrantes del CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN. ¿Y qué ha pasado? Nada, absolutamente nada.

También en los informes sobre la situación financiera de EXPORTADORA DE SAL al cierre del tercer trimestre del año pasado están registrados al menos 21 litigios, de los cuales cuatro son mercantiles y podrían demandar erogaciones por el orden de los 11 mil 942 millones de pesos. Pero ahí siguen, durmiendo el sueño de los justos.

Será interesante qué es lo que hará ante todo esto CARLOS PETTERSON OLIVAS, no vaya siendo que resulta que es otro más de los muchos que han llegado a administrar a la EMPRESA SALADA; por lo que quien esto escribe mejor seguirá BALCONEANDO. . .