Por Alejandro Barañano
Ayer el diputado CRISTIAN AGÚNDEZ GÓMEZ advirtió que en Los Cabos hay un pueblo que se siente traicionado por parte del alcalde OSCAR LEGGS CASTRO, y lo basó porque según él, confiaron en que honraría la palabra empeñada, sin embargo en estos primeros días de gestión lo que se ha visto es un gobierno sin sentido humano.
Y justo ahí, fue cuando el legislador aprovechó la máxima tribuna del Congreso del Estado y se puso a parlotear como si estuviera en un lavadero, sin distinguir la investidura que posee y despotricando sin ton ni son, al grado de asegurar que en el corto periodo de su mandato – en clara referencia el edil cabeño– ya ha sido objeto de observaciones y de reclamos debido a sus dudosos manejos, dejando atrás los principios de la CUARTA TRANSFORMACIÓN.
El “cachorro” de Santa Anita creyó seguramente que con tan inverisímiles comentarios en un espacio que debe ser usado para cuestiones de mayor relevancia, lograría que todo retumbara a su alrededor, ello sin mediar que ante su dicho llegaría una respuesta inmediata y contundente.
Y es que al alcalde OSCAR LEGGS CASTRO no le temblaron las canillas y replicó vía redes sociales a las acusaciones hechas por el vástago de NARCISO AGÚNDEZ MONTAÑO, aclarándole que la etapa de las campañas políticas ya habían quedado atrás, y que en la actualidad –gracias al apoyo de los cabeños– es presidente municipal de todos los habitantes de Los Cabos. Eso, nada más para abrir boca.
Después dejó en claro que en la conformación del equipo que lo acompaña en el actual Ayuntamiento, invitó a participar como servidores públicos a ciudadanas y ciudadanos sin distinción de su ideología política, sino por su capacidad y talento, y que esto lo ha llevado a confiar en que todos ellos le servirán al pueblo como se los ha encargado.
También evidenció en la transmisión en vivo que se realizó, que los integrantes del Cabildo -en su mayoría- le dieron el voto de confianza para que las personas propuestas desempeñen su responsabilidad bajo el compromiso de ser evaluados en 30 días, cosa que a la fecha tal lapso no se ha cumplido y por lo tanto siguen a prueba.
No obstante y dicho lo anterior, puntualizó abiertamente que los legisladores, esos que se supone tienen la alta responsabilidad de crear y modificar los preceptos legales en beneficio de la sociedad, están obligados a sustentar con pruebas cualquier señalamientos que realicen, y en el caso de OSCAR LEGGS CASTRO, eso de acusarlo de dudosos malo manejos por la presunta compra de alfalfa por parte de su gobierno, pues es sencillo: “si tiene pruebas que las presente y que se proceda conforme a derecho”.
Pero para ese momento el tiro ya estaba cantado, y el alcalde cabeño –que no es nada dejado por cierto– señaló que sería muy lamentable que el CONGRESO DEL ESTADO se utilice con propósitos meramente políticos, sobre todo cuando esto puede ser interpretado como una forma de presión, chantaje o revancha política.
Y es que ahora se sabe que OSCAR LEGGS CASTRO no aceptó semanas atrás la propuesta que le hiciera el propio CRISTIAN AGÚNDEZ GÓMEZ de incluir en espacios de primer y segundo nivel del Gobierno Municipal a más de 30 personas con los cuales mantiene compromiso, y que curiosamente ninguno de ellos caminaron durante la campaña, sino que simplemente lo que quiere el clan Agúndez es imponerlos para su control político con miras al año 2024. ¡Quihubole!
Así que la respuesta del nativo de Migriño fue clara y contundente ante el berrinche que hiciera el hijo de NARCISO AGÚNDEZ CASTRO, pues el edil cabeño aseguró que no permitirá que la Administración Municipal sea utilizada como plataforma para proyectos políticos de tipo personal. ¡Así o más clarito!
En pocas palabras y recapitulando, quedó visto que OSCAR LEGGS CASTRO no va a ceder ante ninguna presión o chantaje que se le haga, y mucho menos permitirá que alguien se apodere de los espacios del gobierno para hacer negocios en beneficio propio. O sea, que el tiro está cantado, y solo falta esperar ver si lo entienden algunos hijos de papá; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .