Por Alejandro Barañano
El Congreso del Estado acordó el martes pasado exhortar a la Secretaría de Educación Pública Federal para que se inicien los trámites de basificación de los docentes que laboran en el COLEGIO NACIONAL DE EDUCACIÓN PROFESIONAL TÉCNICA DE BAJA CALIFORNIA SUR, y que de igual forma se inicie con los trámites de homologación salarial para los mismos maestros.
Fue el diputado JOSÉ MARÍA AVILÉS CASTRO quien además acusó que hasta el momento no se ha registrado ningún avance en cuanto a la basificación de los profesores de este nivel educativo, y en la discusión del tema el diputado CHRISTIAN AGÚNDEZ GÓMEZ, apoyó la propuesta por ser destinada a una lucha justa –dijo– para retribuir a quien lo merece, esto en clara alusión a los maestros, pues son merecedores de poder contar con la seguridad laboral mediante la homologación de los salarios, cosa que a decir de muchos es correcto y aceptado.
Pero hasta el momento ninguna autoridad a volteado a ver qué es lo que sucede al interior del CONALEP SUDCALIFORNIANO, pues ya raya en una constantes persecución en perjuicio del personal de esa institución educativa por parte de su directora estatal MILDRED EUNISSE OROZCO GONZÁLEZ, pues desde que asumió esa posición ha mantenido en todo momento una actitud prepotente, irrespetuosa y de total acoso, esto sin dejar de lado la enfermiza paranoilla en la que vive, al grado de que no deja que los docentes y trabajadores hablen entre si pues cree que todo el mundo quiere dañarla.
Y es que parece increíble que a tan solo ocho meses de ocupar la DIRECCIÓN ESTATAL DEL CONALEP, se ha hecho de innumerables enemigos personales, sobre todo porque presume en todo momento que es hija de un compadre del gobernador VÍCTOR MANUEL CASTRO COSÍO, por lo que asegura que nadie podrá ponerla en cintura ante su mal actuar y otras linduras en las que ha caído.
Y lo digo porque MILDRED EUNISSE OROZCO GONZÁLEZ ha perdido totalmente el piso, y en vez de llevar a cabo prácticas apegadas a los valores de transparencia, innovación, calidad y flexibilidad, simplemente velan por su conveniencia y beneficio económico personal, pues son muchas las voces que están señalando que la AÚN DIRECTORA ESTATAL DEL CONALEP no solo está abusando en la forma de conducirse con los docentes y trabajadores, sino que ha hecho lo que ha querido con los recursos económicos del plantel, ya que de manera reiterada se ha autorizado préstamos que fluctúan hasta por 30 mil pesos algunos de ellos. Y ojo, tenemos las pruebas, no son mitotes.
Seguro que es momento ya que la SECRETARÍA DE FINANZAS DEL GOBIERNO DEL ESTADO y la SECRETARIA DE EDUCACIÓN PÚBLICA se den a la tarea de investigar este escabroso asunto, pues no se vale que simplemente por ser hija de un maestro jubilado de la vieja guardia, y que ahora se mueve en las altas esferas gubernamentales, se haga y deshaga a una institución que se supone debe generar mayores oportunidades a los jóvenes y no de mejores beneficios para quien la dirige.
Ahora bien, si los legisladores locales hablan de que los maestros son merecedores de poder contar con seguridad laboral mediante una basificación y la homologación de los salarios para que puedan contar con una retribución digna, es por demás plausible, pero que chequen mejor lo que la TODAVÍA DIRECTORA ESTATAL DEL CONALEP recibe mensualmente de salario, pues a pesar de que se le rebajó 20 mil pesos a su paga, desde febrero pasado se está llevando aun y con el pésimo comportamiento mostrado, un total de 60 mil pesos; desglosados con 40 mil de ellos en sus haberes y los otros 20 mil a título de compensación . . . ¡QUIHÚBOLE!; por lo mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .
