Por Alejandro Barañano
Varios medios de comunicación –nacionales y locales– dieron a conocer los casos de presuntas ilegalidades o anomalías que se cometieron durante la reciente administración del FONDO NACIONAL DE FOMENTO AL TURISMO; entre ellas las que se relacionan con predios que se ubican en Loreto, Nopoló y la ciudad de La Paz.
Y es que ahora se sabe que ROGELIO JIMÉNEZ PONS está siendo investigado por MILEYLI MARÍA WILSON, quien es la directora de Comercialización del FONDO NACIONAL DE FOMENTO AL TURISMO, así como por el nuevo director de la dependencia, JAVIER MAY RODRÍGUEZ, y quienes desde el pasado 10 de mayo presentaron un documento en el que se señalan las pillerías que se cometieron.
Sin embargo, esto no nos debe de sorprender, pues hace 14 años atrás en el SENADO DE LA REPÚBLICA se formó una Comisión Investigadora ante las presuntas irregularidades que cometió JOHN McCARTHY, esto cuando estuvo al frente de la misma dependencia, ya que se evidenciaron desvíos millonarios y despilfarros durante su gestión para favorecer a firmas extranjeras en la adjudicación de terrenos por debajo de su valor real en Los Cabos a favor de “personajes poderosos”.
La propuesta para que se integrará dicha comisión la formuló quien era el presidente de la Comisión de Turismo, o sea LUIS COPPOLA JOFFROY, la cual fue analizada en la Junta de Coordinación Política de aquella época ya que las tropelías, abusos e irregularidades cometidos por McCARTHY eran enormes y existía un grave daño patrimonial que debía ser investigado.
Para ello, se hizo notar que deberían transparentarse todas y cada una de las decisiones que fueron tomadas por JOHN McCARTHY en torno al proyecto denominado ESCALERA NAÚTICA, pues se habían invertido más de mil 500 millones de pesos y resultó ser un rotundo fiasco toda vez que las principales obras quedaron suspendidas.
En la propuesta de LUIS COPPOLA JOFFROY se advertía además que JOHN McCARTHY era un mero vendedor de tiempo compartido y un ex funcionario de la banca nacionalizada que estuvo al frente de FONDO NACIONAL DE FOMENTO AL TURISMO por seis años, y que había sido “ampliamente cuestionado” por las decisiones poco claras que tomó y que representaron pérdidas patrimoniales y daños al entorno ambiental.
El mismo empresario cabeño –siendo Senador de la República– sostuvo que el PROYECTO MAR DE CORTÉS en nada había fortalecido a la industria náutica mexicana, y mucho menos a las marinas turísticas del país, pues más bien se trataba de una competencia desleal.
Otro de los proyectos en el cual brotaron varias irregularidades fue el desarrollo turístico conocido como LORETO BAY, el cual el mismo LUIS COPPOLA JOFFROY llamó verdadero fracaso pues no era más que otra estafa pues el proceso estuvo viciado de origen.
Y es que para ese proyecto –en abril del 2004– el FONDO NACIONAL DE FOMENTO AL TURISMO había vendido 182 mil metros cuadrados de costa a LORETO PARTNERS en 4.9 millones de dólares, es decir, o sea a 27 dólares por metro cuadrado, cantidad muy por debajo del precio comercial que estaba estimado en ese entonces en unos 100 dólares el metro cuadrado. ¡QUIHÚBOLE!
Así que el nuevo escándalo donde ahora se está involucrando a ROGELIO JIMÉNEZ PONS seguro no pasará a mayores, pues está visto que quienes llegan a la titularidad del FONDO NACIONAL DE FOMENTO AL TURISMO se van al final con los bolsillos totalmente cargados de dinero sin que nadie haga nada por detenerlos; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .
