BALCONEANDO / ¡RAPACIDAD TOTAL!

Por Alejandro Barañano

 

Tarde que temprano la verdad siempre sale a flote, y lo digo porque un grupo de personas expusieron que por desgracia están siendo víctimas de una estafa, la cual fue fraguada en el año 2003 por FERNANDO DÍAZ PINEDA, quien en ese entonces fungía como dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos en Cabo San Lucas, y vendió varios predios ubicados en COLONIA FLORES MAGÓN de ese destino turístico.

Y es que los INCAUTOS COMPRADORES ahora denuncian que temen perder sus terrenos debido a que la compra que hicieron aparentemente se trató de un fraude, y que desde el año 2020 quieren despojarlos de algo que se supone era suyo.

Y es que resulta que la INMOBILIARIA TERRANOBLE hace un par de años los desalojó e incluso les demolió algunas construcciones que había en el lugar, por lo que al percatarse de lo que estaba ocurriendo no les quedó de otra más que presentar una denuncia para exigir justicia.

Resulta que fue apenas hace unos cuantos días atrás que los hoy afectados se percataron que la constructora denominada “EL CARDÓN” que es representada por SHEIDI DÍAZ, quiere rematar los predios que en el 2033 le compraron a FERNANDO DÍAZ PINEDA, al grado que son alrededor de 49 personas de las 200 afectadas las que siguen en pie de lucha para recuperar lo que consideraban es suyo.

El grupo defraudado exige la solución del caso, pues es un problema que vienen acarreando desde hace dos décadas cuando pagaron por los lotes que luego fueron vendidos a la inmobiliaria antes señalada, aunque cabe decir que aunque aseguran tener todos los documentos de pago de los terrenos nunca se les dio algún documentos oficial que legalizara la compra venta, pues señalan que los pagos se hicieron directamente a las OFICINAS DE LA CROC cuando el representante de dicha agrupación sindical era FERNANDO DÍAZ PINEDA.

Ahora se sabe que los lotes fueron vendidos a los trabajadores por un precio que rondaba entre los 27 mil y los 32 mil pesos, y que al confiar en quien era su representante no se les hizo extraño que no se les diera algún documento por la compra, y que ahora que está demandado FERNANDO DÍAZ PINEDA se descubrió –según testimonios– que los revendió en unos 44 millones de pesos. ¡QUIHÚBOLE!

La situación se ha vuelto patética para los COMPRADORES DEFRAUDADOS, al grado que uno de ellos explicó que desde el año 2020 la CROC les dijo que los apoyaría con asesorías y representación legal, pero que en realidad se han perdido ya varios juicios -de los casi 50 que hay abiertos- en torno al caso, por lo que suponen que hay “GATO ENCERRADO”.

Lo peor del caso es que los afectados han tocado las puertas del GOBIERNO DEL ESTADO y del delegado municipal de Cabo San Lucas, RAYMUNDO ZAMORA CESEÑA, y que ninguna de las dos instancias les han brindado apoyo, por lo que no tendrán de otra más que plantarse las oficinas de la CROC de tiempo completo, pues fue ahí donde fueron defraudados; mientras tanto quien esto escribe mejor seguirá BALCONEANDO. . .