BALCONEANDO / ¡Y VAN DE NUEVO!

Por Alejandro Barañano

 

Desde que fue presentado públicamente el proyecto “MISIÓN PUNTA NORTE”, diversos grupos ambientalistas se opusieron al mismo porque está por demás claro que el municipio de La Paz no es apto para un megadesarrollo de tal magnitud, esto basado sobre todo por el grave problema hídrico existente.

Tan es cierto lo anterior, que la actual administración a través de la DIRECCIÓN GENERAL DE GESTIÓN INTEGRAL, corroboró que hay contradicciones en el expediente del polémico desarrollo inmobiliario, además de que se supo que el terreno en el que se pretende construir dicho proyecto cuenta con usos de suelo para la Protección Ecológica de Aprovechamiento, Bienes Nacionales y Habitacional Residencial Turístico. O sea, todo un merequetengue.

Sin embargo, trascendió días atrás, que de nueva cuenta la directiva de SINOW CENTURY 21 acaba de presentar ante las autoridades ambientales una nueva MANIFESTACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL, justo a un año de que su primer trámite fue declarado “IMPROCEDENTE” por la Dirección General de Riesgo e Impacto Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales. ¡QUIHÚBOLE!

Además, y de acuerdo con la gaceta ecológica de la autoridad ambiental, se marca que el proyecto consiste en la urbanización, lotificación, introducción de servicios y construcción de vialidades, para la oferta y venta de un fraccionamiento residencial, donde la superficie total del predio es de un millón 933 metros cuadrados y el área urbanizable es de un millón 877 mil metros cuadrados.

La novedad de la nueva MANIFESTACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL promovida por los “patrones” de “EL MENTIRITAS”como le dicen sus amigos y uno que otro llevado al ex presidente municipal–  es que se contemplan tres lotes de 2 mil 478 metros para la construcción y la operación de dos plantas de tratamiento de aguas residuales así como la construcción y operación de una planta desalinizadora que aportaría agua potable al desarrollo residencial, esto a 4.2 kilómetros de distancia aproximadamente al norte del proyecto.

Ahora bien, se asegura que de instalarse la planta desalinizadora con la que se pretende producir 240 metros cuadrados de agua potable, esta estaría ubicada en la carretera La Paz-San Juan de la Costa a menos de un kilómetro del estero Zacatecas, y a mil cien metros de las aguas de la Bahía de La Paz que son consideradas zona de refugio del tiburón ballena, lo que es una total aberración, se mire por donde se mire.

Luego entonces vale la pena recordar que en 2021, la misma autoridad ambiental dictaminó que el trámite iniciado como una MANIFESTACIÓN DE IMPACTO AMBIENTALparticular” debería encontrarse en los supuestos previstos de la modalidad “regional“, tal y como ahora lo hacen los promoventes.

Además esta nueva MANIFESTACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL se adecúa a las condicionantes que estableció a su antojo el XVI Ayuntamiento de La Paz que presidió RUBÉN GREGORIO MUÑOZ ÁLVAREZ, esto cuando de forma controvertida  autorizó el cambio de uso de suelo y condicionando dicho desarrollo inmobiliario a la construcción de la planta desalinizadora, a una planta de tratamiento de aguas residuales y a la entrega de un pozo al interior polígono del desarrollo a favor del organismo operador de agua del Gobierno Municipal, cosa que quedó en veremos.

Pero dichas condicionantes y la supuesta autorización del uso de suelo fueron puestas bajo un juicio de nulidad iniciado por el actual XVII Ayuntamiento de La Paz que preside MILENA QUIROGA ROMERO, y donde de acuerdo con las últimas declaraciones de la alcaldesa, a “MISIÓN PUNTA NORTE” se le nulificarán las actas de Cabildo de su autorización por ser consideradas ilegales, por lo que estaremos a esperar de ver en qué termina todo esto; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .