Por José Luis Puga Lizardi
Pirotecnia Política: “Hay una diferencia entre reconocer y confesar. Reconocer supone suavizarlo, poner excusas para algo que no puede excusarse; confesar solo menciona el delito en toda su crudeza.” (Veronica Roth)
El problema del agua potable en La Paz, es un asunto añejo que ninguna autoridad municipal ha podido resolver de fondo y menos la que preside MILENA QUIROGA ROMERO, a quien le sobran pretextos; de no ser por la intervención directa de la Comisión Estatal del Agua, el tema insigne de la campaña electoral de la ingeniero, ya hubiera provocado un estallido social, sin duda.
La intervención del Gobierno de Baja California Sur, en prácticamente todos los temas que tienen que ver con la obligatoriedad constitucional del Ayuntamiento de La Paz, misma que se da bajo esquemas de colaboración, tienen lógica, ya que al Poder Ejecutivo Estatal, no le es favorable tener una ciudad paralizada por la inoperancia de quien en campaña sostenía ser la poseedora de los talentos y conocimientos para resolver los problemas de siempre.
MILENA QUIROGA le mintió a sus electores; le está fallando a quienes creyeron en ella y también a quienes acertadamente no la vieron como la mejor opción para guiar a la administración municipal hacia una transformación de fondo que supuestamente permitiría dar resultados a la gente; hay decepción en quienes confiaron en ella, mientras que el resto de la ciudadanía dividida ideológicamente, también está pagando las consecuencia de esta calamidad.
Lo que sí hay que reconocerle al Gobierno de La Paz, es que en la justa medianía cumple con la recolección de basura, de ahí en fuera sus innovadoras políticas públicas, no terminan por entregarle a los paceños resultados satisfactorios ¿o sí?
MILENA QUIROGA en alguna ocasión expuso un plan que contenía la solución de los problemas municipales y lo denominó “Plan de Bienestar para La Paz”, dijo en esa ocasión que atendería y resolvería el manejo del agua, economía para crecer, vivir seguros, servicios públicos, Gobierno abierto, participación ciudadana, gestión integral de la ciudad, bienestar, naturaleza para el futuro y gobierno con perspectiva de género; dice un viejo adagio que prometer no empobrece, cumplir es lo que aniquila.
Los problemas de desabasto que se sufren en La Paz, de los que dan cuenta miles de afectados todos los días, no se resolvió con cambiar el horario para que las empresas privadas brinden el servicio que el Ayuntamiento a través del SAPA no puede ofrecer, tampoco se solucionó mandando más litros por segundo a las redes de distribución; esta situación deja en evidencia que los expertos en el tema del agua encabezados por MILENA QUIROGA, mintieron cuando dijeron que sabían hacerlo; no hay agua en los hogares por incapacidad de los responsables de distribuirla, lo que sí hay son pretextos.
Si al Gobierno de Baja California Sur, le preocupa la falta de sapiencia y capacidad política y técnica del Ayuntamiento para resolver los problemas añejos que sufren los Paceños –como el del agua, básicamente- es a los propios ciudadanos a quienes más les inquieta esta situación provocada por un gobierno insensible, invisible, inoloro, incoloro e insípido; MILENA, no fue la solución para los graves problemas de La Paz, como no lo fueron los anteriores, porque son igual y eso evidentemente tendrá consecuencias. Ya veremos.
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