FACTOR POLÍTICO / CORCHOLANDYA EN LA PAZ

Por Luis Miguel Aragón

 

La semana pasada estuvieron en La Paz, tres de las cinco corcholatas de MORENA que aspiran a suceder en la Presidencia a Andrés Manuel López Obrador. En esta campaña que no es campaña. Ricardo Monreal, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López, hicieron presencia en la capital del estado, en diferentes foros. Cabe mencionar que Marcelo Ebrard, otra de las corcholatas, había visitado el municipio de Los Cabos dos semanas antes.

La campaña que no es campaña de Claudia y Adán se parecen mucho, son casi iguales. Derroche de recursos, acarreo y respaldo de funcionarios. De Marcelo es menor el recurso gastado. En lo que los tres son muy iguales, es en el programa y guion que utilizan en sus eventos. Llegan con retraso de una hora al encuentro con la gente. Les hacen una valla humana que los lleva hasta el templete principal para que la gente no los perturbe. Inician el mensaje con un pasaje que tuvieron en Baja Californias Sur y su población, en seguida hablan de su cercanía con el Presidente y el tiempo que han estado luchando a su lado por la transformación del país. De inmediato empiezan a enumerar los logros del presidente Andrés Manuel, principalmente los programas sociales. El guion les marca que el siguiente punto es acentuar que no deben regresar los corruptos y cierran su participación dejando claro que debe continuar la transformación del país, sin faltar el : Viva México, Viva la Cuatro T, Viva Baja California Sur.

En el Caso de Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña y Manuel Velasco, sus cuotas de poder solo alcanzan para viajar por algunas ciudades del país, realizar ruedas de prensa y reuniones privadas con algunos sectores, todo ello con un gasto menor que los primeros, pero al fin gasto que no está comprobado ni fiscalizado.

Ya falta menos para que MORENA elija a quién los abanderará en la candidatura a la presidencia de la República en la próxima contienda electoral. Pero si creen necesario dar otra vuelta por el país, propongo que todos viajen en el mismo avión, se trasladen en la misma suburban, se pague sólo un equipo de sonido y que los acarreados sean los mismos. Sería algo así como el Doctor Simi: Lo mismo pero más barato.