- Se tiene proyectado, explicó, un ahorro por el orden de los 30 millones de pesos al mes de diciembre del presente año.
Redacción
El Gobierno del Estado lleva a cabo una política de austeridad y del correcto ejercicio de los recursos públicos, que combata la corrupción y evite la impunidad. “La idea de la austeridad no es solamente un principio político, es una forma de mejorar la atención a las y los ciudadanos”, puntualizó el gobernador Víctor Manuel Castro Cosío.
En conferencia de prensa con representantes de los medios locales de comunicación, el mandatario sudcaliforniano dijo que la responsabilidad en el gasto público debe iniciar hablando con transparencia, y la mejor forma es que las y los ciudadanos sepan en qué se gasta el dinero.
En ese sentido dio a conocer que su sueldo será de 85 mil pesos mensuales, secretarios de estado 75 mil pesos, subsecretarios, 65 mil, directores generales 60 mil, directores de área 40 mil, coordinadores 35 mil y jefes de departamento 18 mil pesos.
Adicionalmente al salario que perciban los trabajadores, precisó, no habrá bonos, nóminas complementarias o gratificaciones, puntualizó el mandatario estatal. Habrá una estricta vigilancia interna y externa en el gasto de los recursos, agregó.
Dentro de esta política de austeridad, se eliminan los gastos de representación, el uso de vehículos oficiales para fines particulares, se buscará reducir rentas de edificios, se aplicarán recortes en publicidad, y se subastarán 9 vehículos blindados.
Se tiene proyectado, explicó, un ahorro por el orden de los 30 millones de pesos al mes de diciembre del presente año.
Castro Cosío reiteró el interés de hacer un gobierno con el pueblo y para el pueblo, por lo que esos recursos ahorrados se habrán de reorientar a rubros prioritarios como la salud, la seguridad, la educación, entre otros.
El Ejecutivo Estatal dio a conocer que la deuda heredada de la pasada administración asciende a 9 mil 164 mil millones de pesos, en donde se incluyen 2 mil 055 millones de pesos en bancos, más 7 mil 108 millones de pasivos, más de la mitad del presupuesto asignado para el presente año. “Si a esto se le suma la situación de los ayuntamientos, sumarían 13 mil millones de pesos. Esa es la deuda real de Baja California Sur”, dijo.
Finalmente, reiteró su compromiso de seguir trabajando para reordenar el sistema financiero y buscar el bienestar del pueblo sudcaliforniano.