Por Salvador Castro Iglesias
La Paz tiene sed, mucha sed. Con estos calores de verano, con tanta gente que llega día a día a integrarse a nuestra Ciudad, con tantos desarrollos habitacionales nuevos y tantas fugas en las redes de agua potable, se nos va terminando el agua.
Por otra parte los llamados “piperos” o “huachicoleros del agua”, enredados en una disputa que parece no tener fin y un particular que al parecer tiene los derechos de un pozo de agua de donde les surte lindo y bonito su agüita para repartir (no gratis aclaro), menos agua tendremos.
Los problemas por el abasto de agua no terminan, se agrandan, se vuelven cada día más y más complejos, mientras los Ciudadanos Paceños claman a los 4 vientos por acceder a este preciado y vital líquido que nomás no termina de llegarles a sus casas, sobre todo en este verano abrasador.
Discursos, promesas, dichos y demás nos recetan desde el OOMSAPAS cada año, pero en los hechos… Nada, nada de nada y ahí andamos sin agua.
Se ha dejado de invertir en la búsqueda de nuevos pozos, de nuevas presas y represos, en la red de agua potable que tira tanta agua que pareciera que abunda, con una red vieja y obsoleta.
Los expertos dicen que si hay pero se la están llevando de la red los “piperos”, que cuando no lo hacen hasta sobra para repartir sin miramientos, pero las quejas siguen; colonias con una o dos semanas sin agua que tienen que recurrir a los transportistas para poder tener algo de ella en sus casas, o bien, no dormir esperando que llegue el ansiado líquido a sus hogares para poder recolectar algo de agua.
Este año 2021 nuestro Estado ha sido bendecido con algunas lluvias y se espera que para este fin de semana se aproxime la tormenta tropical Nora que amenaza convertirse en huracán Cat. 1 y los Sudcas rogamos al Dios Tláloc que nos deje mucha agua pero no destrozos como ocurrió con el tal Odile hace ya algunos años.
Si bien los huracanes y tormentas tropicales nos traen mucha agua, también es cierto que un gran porcentaje de ella se va al mar, se tira y desperdicia porque a pesar de vivir en pleno siglo XXI todavía no hemos podido (o querido) resolver como retener tanta condenada agua, y ahí la vemos irse raudamente al mar.
Planes y proyectos ha habido al respecto, mas presas y represos para contener las lluvias que nos caen una o dos veces al año, pero hasta ahí llega todo, muy poca de esa agua se aprovecha.
Obvio que no soy Ingeniero Hidráulico ni nada de eso, pero la lógica me hace pensar que algo podríamos hacer para que toda esa agua no se desperdicie, sin embargo no veo por ningún lado algún proyecto que haga renovar mis esperanzas.
Tenemos un Tecnológico Regional de La Paz, lleno (espero), de sesudos Ingenieros que bien podrían presentar algún proyecto (realizable por supuesto) para hacerle frente a este problema, pero según veo… Nada de eso.
¿Acaso tendrán que venir seres espaciales para darnos una manita como se dice ya lo han hecho en otras épocas?, ¿nos darán el sapiente conocimiento para proyectarnos como una sociedad de 5to. Mundo y tener mucha agua de lluvia captada?.
En verdad no lo sé, pero como que duele ver convertidas en auténticos ríos nuestras calles de la Ciudad que vez que llueve, y sigo pensando ¿Cómo hacer para quedarnos con ella?.
Lo más triste de este complejo asunto (que lo es), es que no haya alguna propuesta seria, novedosa, inteligente, asombrosa, para buscar hacerle frente a esta contrariedad caray, máxime que como bien dijo Don Fco. King Rondero, “el agua es la vida” y aquí vaya que si lo es.
Sé bien que no existen muchos recursos económicos para hacer frente a este problema, pero creo que se debería priorizar ya que sin agua, estamos fritos todos, adiós desarrollo, adiós economía pujante, adiós a los turistas, adiós a la vida.
La prioridad (a mi ver) es invertir más recursos en un buen plan (que sea ejecutable of course) hidráulico Estatal, en vías de mientras bien podría ser comenzar por educar a los Sudcalifornianos en el uso civilizado del agua, no andar regando matas ni banquetas a plena luz del día (cuanti menos en verano), lavar sin tener el grifo del agua abierto (primero se lava y luego se enjuaga), no andar usando la manguera para bañarnos como si fuera cascada y cosas así, crear mayor conciencia en la sabia virtud de aprovechar el agua.
También es evidente que las Autoridades Estatales y Municipales ya no deben de andar autorizando tanto condenado “Car wash”, han crecido por toda la Ciudad como hierba, por todos lados veo esos negocios que si bien son importante fuentes de empleo, también son generadores de grandes cantidades de agua desperdiciada.
En fin amigos, hay mucho por hacer, mucho por planear y ejecutar, La Paz y el Estado se merecen Gobernantes con visión a futuro, que en verdad y de corazón se apliquen a buscar métodos efectivos para obtener ese vital recurso y así poder solucionarlo.
Obvio va mi recomendación a toda la Población de este hermoso Estado, ¡No salgan a la calle si llegara un huracán, tormenta o ciclón!. Nada de andar correteando la lluvia, nada de andar de metiches viendo correr los arroyos y mucho menos querer pasarlos como si fueran expertos anfibios con su autos.
Cada año algunas personas necias y tercas pasan a formar parte de la historia por querer demostrar sus habilidades para cruzar arroyos crecidos y hoy ya no están entre nosotros. Se bien que el fenómeno de la lluvia nos hace querer ver el agua y los arroyos aunque estén corriendo y crecidos, pero la vida vale mucho más que eso. Así que a cuidarnos y a pedir mejores condiciones de vida y poder tener más agua para esta sedienta población.
Nos leemos más adelante …