DARÁN CAPACITACIÓN SOBRE TRASTORNOS MENTALES

  • Se busca una identificación más temprana de pacientes para canalizarlos a la atención especializada.

Redacción

 

El Gobierno de Baja California Sur impartió una capacitación a personal médico y de enfermería que labora en centros de salud sobre las guías de intervención con pacientes que pueden presentar trastornos mentales y neurológicos asociados al uso de sustancias, a fin de que puedan brindar una asistencia inicial que evite un detrimento en su calidad de vida, en tanto son canalizados a la atención especializada.

Este curso que se impartió por videoconferencia a personal operativo de unidades de primer nivel de atención, se basó en los criterios planteados por el Programa de Acción Mundial para Superar las Brechas en Salud Mental, para identificar a personas con este tipo de patologías, emprender tratamientos psicosociales, darles seguimiento y referirlos a instituciones de salud focalizadas en esta problemática, dijo el coordinador estatal de los Centros de Atención Primaria en Adicciones, Juan Pablo Peña.

La estrategia está dirigida a personal no especializado en salud mental o neurología del primer nivel de atención, como son médicos generales, enfermeros y promotores de la salud, con la finalidad de que puedan reconocer las señales de alerta de enfermedades como la depresión, la psicosis, trastornos neurológicos como la demencia, trastornos del desarrollo y de la conducta, entre otros, de tal manera que puedan proporcionar una primera respuesta en salud, comentó.

El planteamiento es que los reciban con empatía y respeto a sus derechos humanos, pero además que realicen una evaluación general de ellos, para identificar sintomatología y poder realizar una hipótesis diagnóstica, atender otras necesidades en salud que manifiesten y canalizarlos a centros de asistencia psicológica o turnarlos a la especialidad hospitalaria de neurología, para que puedan restablecer o mejorar su bienestar, señaló.

Este Programa de Acción Mundial para Superar las Brechas en Salud Mental es una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud que hoy se retoma en Baja California Sur para fortalecer la detección de pacientes con estas afecciones y estar en condiciones de brindarles servicios terapéuticos más oportunos.