BALCONEANDO / LEGGS: ¡HERMANAMIENTO!

Por Alejandro Barañano

 

  • “Ayudar a quien lo necesita no sólo es parte del deber, sino de la felicidad”: José Martí

 

La que fue denominada como Depresión Tropical 12-E sobre el Pacífico Oriental en días pasados, mismo que dio paso a la formación del HURACÁN “KAY” y donde su presencia y recorrido mantuvo en alerta total a los cinco municipios de BAJA CALIFORNIA SUR.

El ciclón golpeó directamente la localidad de Bahía Asunción, así como las de Bahía Tortugas y la zona conocida como Pacífico Norte, Guerrero Negro y Vizcaíno, con inundaciones que no se tenían registro desde hacía varios años, trayendo además consigo vientos de hasta 140 kilómetros por hora, oleaje elevado y ocasionando lluvias en toda la media península, y lo peor de todo, dejando más de 30 MIL PERSONAS DAMNIFICADAS en toda lo largo y ancho de la entidad.

En la zona del MUNICIPIO DE LOS CABOS se reportó saldo blanco e inmediatamente se dieron a conocer serie de acuerdos para restablecer las labores y con ello volver a la normalidad. ¿Cómo cuáles? Bueno, pues primero que la reanudación de las clases sería hasta hoy lunes, ello porque algunos planteles educativos se destinaron a ser refugios temporales, razón por lo cual se tenía que estar atentos a la entrega de las instalaciones, las cuales deberían estar en óptimas condiciones para recibir al alumnado.

Después, en un recorrido que realizó el presidente municipal OSCAR LEGGS CASTRO el jueves pasado por la zona rural, –esto para hacer el recuento de los daños tras de “Kay”– informó que por fortuna las lluvias torrenciales no ocasionaron daños mayores, solo algunas afectaciones en algunas vialidades que comunican a diversas rancherías; y en la zona conurbada de SAN JOSÉ DEL CABO y puerto de CABO SAN LUCAS, donde inmediatamente se iniciaron los trabajos en la rehabilitación de calles, así como los servicios básicos para que todo volviera a ser como antes.

Sin embargo en la zona norte del estado las cosas eran muy diferentes, pues en MULEGÉ crecieron los arroyos de forma alarmante por las broncas aguas provenientes de la serranía, afectando el oasis de esa comunidad.

En SAN BRUNO se cortó la carretera y hubo desbordamientos en los arroyos de la SIERRA DE SAN JOSÉ DE MAGDALENA, sucediendo lo mismo en SANTA ROSALÍA con el ARROYO SAN LUCIANO que dejó muchas colonias incomunicadas en SAN IGNACIO y a otras comunidades del municipio.

Entonces al tener el control absoluto de lo ocurría en Los Cabos, su alcalde OSCAR LEGGS CASTRO junto con cercanos colaboradores y algunos regidores, tomó la decisión de ir a donde se ocupaba: El municipio de Mulegé.

Antes que otra cosa envió la unidad móvil de las brigadas médicas al lugar, y puso manos a la obra junto con los miembros del cuerpo edilicio ROGELIO TORNERO y OMAR ORBE; los directores de Transparencia, MIGUEL ORNELAS ROJO, la titular de Cultura Municipal, IRENE ROMÁN, y el equipo de trabajo de Comunicación Social que encabeza ALEJANDRA ESTRADA OBREGÓN.

Pero faltaba un plus adicional, y que mejor que ayudar con alimentos al HOGAR DEL ANCIANO “SAN MARTÍN DE PORRES” del puerto de Santa Rosalía, donde acompañado de la alcaldesa EDITH AGUILAR VILLAVICENCIO, visitó el icónico lugar para dialogar y apoyar con los residentes del sitio, quienes mostraron su aprecio por la visita realizada.

Ahí, de nueva cuenta los regidores ROGELIO TORNERO y OMAR ORBE, acompañados de sus esposas, y junto con la directora de Cultura y del titular de Transparencia Municipal, se comprometieron a título personal dotar de materiales y de la mano de obra necesaria para que se impermeabilice el edificio, lo que hizo que muchos expresaran el beneplácito por su visita.

Con todo esto se cumplía la invitación que hizo del gobernador VÍCTOR MANUEL CASTRO COSÍO para contribuir de manera solidaria con Mulegé y sus gentes, aunque la ayuda no termina todavía, pues se reactivarán CENTROS DE ACOPIO EN LOS CABOS para continuar dándoles la mano a todos los que resultaron afectados por los pasados fenómenos meteorológicos; por lo que mejor quien esto escribe seguirá BALCONEANDO. . .